FELIZ

 Feliz año nuevo! Dice el gentío en medio del caos, el nerviosismo, la ansiedad y la borrachera de una celebración anual que cada año se ve más distorcionada frente a mis ojos. La frase ya casi no tiene el valor que tenía antes, puesto que estaba siempre bien acompañada de unos sinceros y premeditados deseos de prosperidad personalizados para cada quien que uno abrazara. Pero hoy como todo va cadavezmasrápido, con suerte te desean un feliz año nuevo y que todos tus deseos se cumplan. De ser así, tendría casa y auto para mi y toda mi familia, viajes por el mundo y visitas a mis amigos extranjeros, un terreno gigante y hermoso para albergar a miles de perros que corran sanos y felices por todos lados, una casona gigante para adoptar a 10 niños de distintas edades, una casa de acogida para ancianos con todo lujo, un plan de Isapre infalibe a prueba de todas las enfermedades, una disco-teca, una videoteca y una biblioteca infinitamente gigante y pases liberados para asistir a todos los conciertos de mis bandas favoritas este año. Me casaría en grande con una fiesta inolvidable y me quedaría de vaga un par de años en mi casa cuidando a mis hijos para que no tengan que ir a la sala cuna a pegarse diezmil resfríos al año.
 Todo eso y más lograría este año si todos mis deseos se cumplieran, pero creo que sería feliz solo con tener a mi familia cerca, mis hijos sanos y el corazón inundado de amor. Para lo demás, faltan muchos años nuevos más.