40 LUCAS

A nosotros no nos toca ni un pedazo de ese dinero. Es solo a los que tienen cargas familiares, sin embargo somos nosotros quienes nos sacamos la cresta trabajando de luna a luna, los fines de semana, los ratos libres, sin respiro alguno.
Si hubiera tocado parte de esas 40 lucas podría haber ido a alguno de los recitales de la semana pasada. Para eso, antes debería tener un hijo.

YOUTH

La juventud me coquetea, me rodea, me llama. Me camuflo a veces entre generaciones menores, pero no hay nada mejor que estar con tu generación, con tu gente, con tus amigos. La conversa se eleva un escalón, la estupidez suena más interesante y divertida a la vez. Me gusta la gente joven de espíritu, pero que en realidad pertenezca a mi tiempo. Me gusta aprender más que enseñar. Me gusta dejarme llevar por lo que soy sin cuestionamientos. Me gusta mi propia juventud.

SORTEAR ETAPAS

Cuando vas en el tren, con la mirada perdida en el paisaje, con las orejas llenas de tu música, desconectada de lo que te rodea y de pronto, un chico de 15 te está observando con ojos de lujuria, con una sonrisa coqueta, con ganas de acercarse a engrupirte, debes considerar cambiar tu armario y dejar el vestido rosa a lunares en el baúl de los recuerdos y lucir como la mujer adulta que eres.
Y cuando una chica te mira desde el otro bagón, con un bebé en sus brazos y otra pequeña a su lado que le pide golosinas, es porque a pesar de no sentirte preradado, ya estas en edad de ser el padre de una familia, el proveedor de un hogar, el compañero de una mujer contemporánea a ti.
A veces hay que atreverse y pasar a la siguiente etapa, si es que te importa lo que opine el mundo.

EL DESTELLO

Afuera todo oscuro. En mis orejas alguna canción de mi preferencia. Sólo veo el reflejo del interior del tren en la ventana. De pronto, entre sombras de árboles y naturaleza, un destello de luz a la distancia, una línea casi perfecta de algo que brilla. Se acerca poco a poco. Puedo distinguir que trata de luces. La ciudad viene a mi encuentro, aún a última hora, en medio de la noche. Al acercarme más, pasan por mi ventana cada una de las ampolletas de los postes que forman este destello. Pertenecen a una población de casas idénticas en diseño, distintas en las historias que guardan. Yo me preparo para bajar. Ordeno mis cosas, guardo la música, me pinto los labios. Vuelve la naturaleza afuera y la oscuridad absoluta. Unos minutos más tarde reaparece la ciudad, ahora distinta, con edificaciones diversas, con calles y canchas de tenis, con locales comerciales y terminales de buses. Me pongo de pie. Entramos a la vieja estación, diviso a mi chico esperandome ansioso, buscandome entre la multitud. Bajo con calma. Todo de tiñe del amarillento de las luces. Camino cansada, contenta de llegar a mi destino, dichosa de reencontrarme con su abrazo.

MI AMIGO

Amigo, tres años han pasado y aun te recuerdo. Nos reencontraremos un día? Quien sabe.

WHO WATCHES THE WATCHMEN?

Por defecto, he estado cercana al mundo del cómic y de las novelas gráficas modernas. Por defecto algo conozco de eso, pues personas cercanas a mi me han involucrado con los superhéroes y los mundos superfantásticos de personajes ficticios asombrosos.
Alguna vez vi unas revistas con el nombre Watchmen en la portada y eso es prácticamente todo lo que sabía al respecto.
Frente a la pantalla de cine debo decir que me encanté con la trama poco usual sobre superhéroes que se cuenta en Los Vigilantes (como se tradujo al español), me enamoré de la impresionante visualidad de sus imágenes, (aun sabiendo que hay muchos elementos digitales) me entusiasmé con la historia de los Estados Unidos que identifiqué y me estremecí con la música que acompañaba los hechos.
Hay que verla. Eso sí, el espectador o debe tener una cercanía con la novela o debe tener gustos un poco cinéfilos para poder apreciar la magnitud de la producción. Las casi 3 horas se pasan volando. Y al final, comprendes que aunque hayas salido de la pista, lo que es tuyo siempre te llama de vuelta.

SOCIAL

Aun hoy, con 28 años, me es difícil sociabilizar. Y es que hay algo en mi que me frena a sentirme completamente cercana a la gente. A veces hasta me cuesta decir la palabra precisa para hacer sentir cómodo al otro y por el contrario, termino hablando estupideces pseudo- divertidas que me sacan del paso para aparentar ser una persona agradable. Así como Dexter el asesino, a veces me siento detrás de una máscara de persona normal con gustos normales, con sentimientos normales, con pensamientos comunes al resto para pasar inadvertida frente al mundo. Debe ser lo que alguna vez me dijo Guto y toda esa palabrería de la "chacra" y el mapa astrológico. Debe ser que de alguna manera tengo una personalidad sociópata. Debe ser por eso que aun no le tomo el gusto al Facebook y a encontrar gente de antaño y unirme con la familia. Debe ser que soy rara.

EMBORA

Mi reino por unas vacaciones. Eso dije al cielo, pero como no tengo reino, no conseguí nada. Sólo conseguí que Diosito adelantara el invierno y yo, la pelotuda lo enfrento con vestido corto y pantyes delgadas queriendo parecer señorita.
Odio las horas extras pero adoro la tranquilidad de trabajar sin mucha bulla, sin mucha gente, con las orejas llenas de música que me gusta, alejada del mundo por un instante, con mis dedos y mis ojos en el trabajo pero con el corazón en las nubes.
Gostaría ir embora de tudo, esquecer do quem sou no escritòrio, lembrar do que sou realmente e virar pra menina, viajar até o povo do meu amado e abraçar ele ate ficar mimindo. Gostaría ir embora. Fui.