LOVE

"I'm all about you, you're all about me,
We're all about each other..."

HACIENDO EQUILIBRIO

Cuando el viento sopla fuerte de un lado y sopla fuerte del otro y vas caminando por la cuerda floja, es difícil hacer equilibrio. Y es asi como no sólo es cuerpo vale. También vale la fuerza mental y la fuerza emocional para no caer a un lado o al otro. Hay que concentrarse y ponerse firme, ir al son de viento y llegar a salvo al otro lado. Eso es lo que estoy tratando de hacer.

VACACIONES 2009

RECHARGED WITH LOVE

No estaba muerta, andaba de paseo. Y hoy vuelvo más viva que antes, mucho más de lo que estaba hace unas semanas. Estas vacaciones tardías llegaron en buen momento y fueron como un lindo suspiro que me limpió el alma. Me volví a enamorar, me volví a encantar con las cosas simples, me divertí con la aventura y puse en práctica la experiencia sobre la vida diaria que llevo a cuestas.
Me gustó fotografiar los momentos, los lugares que no conocía y recordar otros por los que pasé cuando era niña. Cada rincón tenía su magia, pues la playa desierta es algo que me apasiona, que nos apasiona a mi y a mi chico.
Pasamos nuestro día de aniversario número 3 completamente solos, disfrutandonos al máximo, sintiendonos libres y lejos de toda rutina. Me encantó todo y cada una de las cosas que vivimos estas vacaciones (excepto por los zancudos que hicieron de mi cuerpito un buffet libre)
Vuelvo a trabajar con nuevos aires, aunque sé que pronto me llenaré de los vicios de la gente de mi ciudad. Pero en mi recuerdo los maravillosos momentos se me quedarán grabados en la sangre, en mi paso liviano, en mis oídos como música, en mi nariz los aromas de todos los paisajes que recorrimos, de las comidas que saboreamos, de la sopa al anochecer en la cama, juntitos, regaloneando y disfrutando todo nuestro amor. Me quedo con todo lo vivido. Vengo recargada.

UPSTAIRS

Algunos no comprenderán por completo mi alegría, pero yo estoy infinitamente llena de dicha y orgullo de haber dado un paso más arriba en la escalera que me lleva a mis metas en la vida.
La semana pasada cerré un capítulo, uno en el que estaba inmersa hace 9 años, cuando veía la vida con otros ojos y mis expectativas principalmente laborales eran completamente diferentes. Hace 9 años pensaba en el éxito profesional por sobre la vida familiar. Era un chica inteligente y poderosa, con muy pocas armas pero tremendamente influyente y talentosa. Fue así como me encomendé a los "santos" de la economía y me endeudé para cumplir con mis sueños.
9 años me tomó saldar esa deuda. Aún me quedan otras, pero miro hacia atrás con orgullo de saber que he recorrido un buen camino y que mi perseverancia a cumplir con mis compromisos me ha llevado a un buen fin.
Viajé por el camino del estudiante que solía ser. Reconocí las calles, los almacenes, las grandiosas casas, el ambientes tranquilo y acogedor de aquel barrio. Bajé, cancelé mi cuenta y pasé a comer un helado a modo de humilde celebración por haber cumplido, por haber hecho lo correcto a pesar de todo lo que ha ocurrido en mi vida. Sentí un alivio en mi corazón, un suspiro me devolvió el aliento y las ganas de seguir subiendo la escalera me volvieron con fuerza. Ahora sé que se puede.

HABITAT

La estupidez humana se propaga como una enfermedad, como un resfrío que puede durar unos cuantos días o tal vez se puede volver crónico. Se contagia fácilmente y yo trato de protegerme con analgésicos y paracetamoles contra la estupidez.
Y la verdad es que necesito con urgencia que las personas que me rodeen suban un peldaño y dejen atrás la estupidez, que miren con la frente en alto y vean más allá de sus narices, que se pongan en el lugar del otro, que sean más despiertos, más listos, más solidarios, menos egoístas. A ver si con eso se mata un poco la estupidez que me tiene cansada, a ver si entiendo un poco lo que le pasa a la gente y puedo seguir con mi vida tranquila. Necesito con urgencia cambiar mi habitat diario que me está ahogando poco a poco entre tanta estupidez humana.