CON TEN CION

Dondepuedoarrancarcuandonecesitounaguaridaalejadadelastristezasdiariasylasdesilusiones?
Sinisiquieratengounhogarmaternoalcualacudircuandonecesitocontencion,cuandonecesitouna
palabradeapoyo,cuandonecesitoquemeabriguen?Ymisamigosnocreenquepuedosertanfrágil,
notengohombrosparallorar.Yenparteesmiculpaporparecerfuertetodoeltiempo.Detodasformas
necesitounrespiro,uncobijo,unlugardondesimplementellegarsinmaspreguntasquelamirada
Dondepuedoircuandonecesitosalirdeacá,salirconmispollos,porquesiempresomostres.

TESTEADA

Ya le había perdido el ritmo a las entrevistas laborales y en estos días, cuando he retomado ese rumbo, me siento como un producto que debe ser testeado antes de aplicarse a los seres humanos. Son tantas las preguntas de la sicóloga laboral, son tantas la etapas que debes sortear que finalmente me pregunto si soy una buena persona, si soy una buena madre, si valgo la pena como trabajadora o si no me llamaron a la última entrevista porque a través del test de colores descubrieron que estoy completamente loca.

FULANO

 Un día conocí a un muchacho con un pasado contado por otra boca. Su presente de ese entonces tenía un sabor distinto de lo que conocía de él y así, por las circunstancias de la vida nos hicimos amigos. Éramos amigos laborales, junto con otros que caminaban en allegretto como nosotros.  Y con el paso de los tiempos lo fui conociendo. Y su historia era exáctamente lo que reflejaba su mirada curiosa e insegura a la vez. Un pasado turbio lo hizo turbio y tímido a ratos, en otros era interesante y mal educado, simplemente una mezcla rara de vivencias raras. Ese muchacho que debió ser un hombre desde jóven, camina con paso firme temiendo hacer lo incorrecto. Y yo me pregunto hasta dónde una persona puede negar sus sentimientos, esconder sus sensaciones, arrancar de la verdad que se le viene a la cara cada vez que enfrenta un problema. Es frustante pensar que a veces una mente brillante puede opacarse por el entorno oscuro y poco alentador. Yo creo que tiene muchas cualidades que se empeña en esconder tras una parada desinteresada frente a la vida, diciendo a viva voz que no quiere llegar a los 40, pero que por dentro muere por vivir por siempre, si las cosas que anhela se le dieran como sueña.