Cada vez que homenajean a un difunto, siempre terminan tildandolo como un hombre o mujer maravillosos. "Era tan bueno" es la frase que siempre escuchamos. No me gusta eso, no me gusta hablar bien de las personas cuando ellas ya no pueden oirlo. No todos los difuntos son buenos, ni todos son inolvidables, ni todos fueron grandes personas en vida.
La muerte siempre ha sido un tema complicado. En los ultimos años he perdido a varios seres queridos y me asusta enormemente ver la muerte rondando por mi techo, me siento indefensa ante ello, sin armas para combatirla y mandarla lejos.
Recién ayer supe del deceso de Guillermo Cifuentes, un ex profesor mio de la escuela de cine que me hizo clases de semiología del cine y de edicion y montaje. No puedo decir que él fue un gran hombre, porque no lo conocí tanto, pero sí puedo decir que fue un maestro que me marcó para siempre. Es probable que no muchos sepan esto, porque él y yo no fuimos cercanos, sin embargo tuvo la oportunidad de darme un par de consejos que me han servido como escudo en la vida. El sábado, sin ir más lejos, al son de un bossanova, junto a una taza de café y en compañía de Rodolfo el fotógrafo, recordé nuevamente uno de los principios de vida que rescaté de las palabras de Cifuentes: "en la vida hay que ser siempre firme con nuestras ideas, aunque a veces parezcan radicales. Hay que creer fielmente en lo que somos y lo que queremos, defender lo que pensamos como a nada en el mundo, pues si tenemos la razón, lograremos lo máximo, casi lo perfecto, y si nos equivocamos, caeremos con ambos pies hasta el fondo, pero de igual forma seremos considerados valientes."
Eso me lo dijo Guillermo Cifuentes un día, a mi y al resto de mis compañeros de clases. Sé que ellos tambien lo guardan como un gran tesoro en el corazón. Yo lo llevo en la cima de mi cerebro, junto con todas las enseñanzas cinematográficas que me dejó. Él confió en que yo era buena en lo que hacía. Lamento decepcionarlo, porque no seguí en ese rumbo, sin embargo trato siempre de ser la mejor en lo que sea que haga.
Me apena enormemente y me impacta la noticia de su partida. Me hubiera gustado mucho asistir a su despedida. Pero quiero dejar aqui este escrito como señal de que siempre lo recuerdo, no tan solo como el excelente artista que fue, si no como un hombre verdadero que pasó por mi vida como un gran e inolvidable maestro.
1 comment:
é tão irônico quanto óbvio dizer que a morte faz parte da vida...
acontecimentos como esse nos deixam paralisados, atentos. Poderia ser eu ou tu, afinal...
Aproveite tua vida; viva um dia de cada vez e tente ser feliz.
Nunca perca uma oportunidade (por vergonha ou por preguiça ou por qualquer outro motivo que adie isso) de dizer o que sentes por alguém... Nunca se sabe o dia de amanhã.
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