Hace un año llegue hasta aqui, leyendo sobre la vida reciente de Matias, un niño alto con complejo de Peter pan. Un alma, dos almas se han ido al otro lado. En realidad más que eso, pero dos más cercanas. Un trabajo, dos, tres he tenido que aprender desde entonces. Nuevas caras, nuevos compañeros, nuevos jefes, distintos salarios. No se si aprendi tanto, pero crecí muuuucho, casi hasta el techo. Pasó el verano, paso el viento, paso la lluvia, quedó Donny en las noches de delirio. Un amor, un amante, un dulce beso, una pareja dispareja, muchos rompimientos, algunos planes disueltos en agua con azucar. El mundo giró y me dejó aqui, justo donde estaba antes de que aparecieras, como dice la canción. A veces fui Chinin, otras Yoshimi, cuando me sentía poderosa, otras inté ser garota, otras veces podía ser Noddle y mi pandilla. Pero cuando amé, fui solo yo, como siempre debe ser. Así es que la cuenta por los daños estuvo a mi nombre: lo pagué todo. Muchas bienvenidas, muchas despedidas, muchas músicas que me hacen nacer una y otra vez, muchas ganas de seguir escribiendo y perfeccionando mi español literario.
No se cuantos más vendrán por delante, me refiero a los años y lo demás. Sólo se que hay que abrazar el futuro y aceptar el pasado. Eso es indispensable antes de seguir.
Muito obrigada por estar lendo meu blog. Come together, my friends, and let's eat the world!
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