Estuve muerta por un tiempo. Algo sorprendente, oscuro y maligno sobrevoló por mi cabeza y luego arrancó mi corazón. Me sumergí en un profundo sueño y logré rescatarme a mi misma de las profundidades.
Anoche busque a Toshio. El estaba durmiendo, pero desperto rapidamente para encender su fantastica nave azul que nos llevó por las calles donde en invierno solimos correr bajo la lluvia. Compramos unos cigarrilos y respire fuerte el aire de la calle. El dia estuvo caloroso, pero al caer el sol, junto con las melancolias, cayó el calor.
Aterrizamos cerca del cielo, en unas calles confusas y pintorescas, pobladas de gente poco amigables y otras chicas que paseaban en bicicleta. Toshio y yo, en esa nave perversa que habia visto tantas historias, que había escondido tantos secretos.... que solo Toshio sabe, y por supuesto yo. Nos pusimos al dia con los relatos, pero teniamos hambre de velocidad. Partimos nuevamente en busca de un lugar mas solitario. Aterrizamos en un lugar prohibido, donde los humanos ponen los pies y las maquinas se mantienen al margen. Pero estacionamos ahi de todas formas. Salimos y fuimos a comprar mas cigarrillos. Un niño jugaba arriba del meson, tratando de alcanzar el ventilador, mientras sus padres lo regañaban a medias. Supe que cuando tuviera un hijo, no lo dejaria hacer esas cosas, y mientras reflexionaba eso, Toshio contaba las monedas para ver si le alcanzaban para comprar una fanta mandarina... pero no habia, hahahahaha. Se conformó con el liquido oscuro adictivo con ingredientes secretos.
En fin. Volvimos creca de la nave y nos sentamos en el pasto. Y mientras conversabamos y relatabamos historias fantasticamente entretenidas, nos ibamos hundiendo en esa hierba verde que estaba bajo nuestros traseros. No podiamos escapar. Ambos estabamos sumergidos en ese maldito cesped. Finalmente nos dimos por vencidos. Una vez debajo de todo, encontramos una gran cantidad cosas soprprendentes y otras no tanto que parecian sorprendernos por estar guardadas ahi. Estuvimos un rato paseando en las profundidades, buscando objetos, alucinando con un mundo nuevo para nosotros, hasta que escuchamos unos aullidos. A mi me dio susto, pues era Chinin Chin Chini, no Yoshimi, por lo tanto no estaba preperada fisicamente para enfrentar a un enemigo. Pero Toshio, con sus poderes paranormales logró decifrar el misterio. Justo detras de un monton de hierba encontramos un perro atascado entre unas ramas. Rapidamente fuimos en su ayuda y logramos sacarlo de ahí. En agradecimiento, el canino nos llevo consigo a la superficie y finalmente pudimos abandonar ese mundo oculto entre el cesped.
Decidimos partir nuevamente, rumbo a nuestras casas, pues ya se habia hecho tarde. Subimos a la nave y contamos nuestras historias resagadas. Yo recorde de pronto un personaje que se hace llamar con una G, luego una E y finalmente una M ( o parece que es una N) Toshio, desvariando aun me dio malos consejos que decidi no seguir y despues de despedirme de el, le desee un feliz viaje de vacaciones, mientras yo caminaba tranquila, con el alma de vuelta al cuerpo hasta mi casa.
1 comment:
me gusta tu espacio... cuándo te actualizas?
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